Muchas personas en tu vida siempre van a querer opinar sobre tus gustos, emociones, forma de ser. Pero es aquí donde tenemos que mantenernos conscientes en que es lo que nos interesa y hasta donde queremos llegar. Hablando de una vocación, es una decisión propia cuando tú eliges que es lo que quieres estudiar, dependiendo de tus gustos que hayas obtenido a lo largo de tu vida te guiaras a lo que más se acerque a estos.
Es un proceso difícil en el que muchas personas suelen opinar y decir qué debemos hacer o estudiar. Estudiar la carrera de tus sueños puede ser muy emocionante, no sólo te ayudará a desarrollarte como intelecto y persona, sino que también obtendrás mejores oportunidades laborales futuras.
Estudiar lo que te hace feliz tiene muy buenos motivos.
- Incrementará tu autoestima: esto quiere decir que cuando haces algo que te gusta, tu autoestima aumenta, tus habilidades las reforzaras aún más, tendrás más seguridad y satisfacción. Siempre habrá momentos malos, como todo, pero tú decides si mejorarlos o no.
- Tomará toda tu atención: cuando una carrera te apasiona centraras toda tu atención a ella, y te va a interesar cada tema que no te costara nada investigar aún más sobre él.
- Tu mente se expandirá: La pasión por una carrera te convierte en una persona en constante búsqueda. Empezaras a buscar más formas ver los temas, actualizaciones, nuevos conceptos, nuevas maneras de afrontar problemas, etcétera.
- Tu rendimiento mejora: el mejor estímulo para la creatividad y la motivación es hacer algo que te apasiona. Esto te dará mejores resultados en tu futuro, ya sea encontrar un buen trabajo o quedarte con la mejor satisfacción de haber logrado lo que más te gustaba.
- Motivación y felicidad: cuando disfrutas tanto lo que estudias se verá reflejado en tu personalidad y te sentirás una persona feliz, realizada y plena.
Muchas personas lamentablemente no estudiaron la carrera que soñaban por poca economía, por tradición de la familia y tener que estudiar lo que ya se tiene por costumbre, porque talvez piensen que cierta carrera les dejara más dinero, así como estos hay más motivos.
Cuando no haces la lucha por vivir tu sueño, comienzan las consecuencias:
- No tienes interés en tu trabajo.
- No encuentras ningún motivo para trabajar en lo que estudiaste.
- Trabaja por obligación, no con gusto.
- No te sientes seguro de lo que realizas en su trabajo.
- Te estresa lo que haces.
- Puedes provocarte enfermedades por tanto estrés, como ansiedad, depresión.
Por eso es importante que lo que hagas te guste. ¿De verdad estás dispuesto a sacrificar lo que debería ser la mejor etapa de tu vida haciendo algo que no te llena? Dedícate a lo que te gusta y no tendrás que trabajar en la vida.